"EL SOL Y LA LUNA, DOS CARAS"

“EL SOL Y LA LUNA, DOS CARAS”

Por Tania Lizett Escobedo Castañeda

En un día como otros, lleno de tristeza o de alegría, donde una chica común vivía en una casa con sus padres y su hermano mayor; esa chica llamada Paola tenía muchos problemas en su vida bueno, quién no los tiene ¿verdad? pero esta chica tenía algo que la hacía especial. Tenía la energía para seguir adelante y para ver los problemas de forma divertida, ella dibujaba su mundo a su manera, recuerda que cuando era muy pequeña, aproximadamente de 4 años de edad, cuando iba en el kínder le encantaba dibujar y escribir cartas. Claro, lo que ella podía dibujar sólo eran garabatos y sus escrituras eran puras rayitas, pero ella era muy feliz haciendo lo que le gustaba, a pesar de su corta edad ella imaginaba muchísimas cosas hermosas, que iba ser de grande como sería el mundo lleno de sonrisas y sin guerras. Paola, sufrió muchísimo con su maestra de kínder porque no la quería, siempre la rechazaba, le decía que era una niña tonta, que no sabía hacer nada incluso a veces hasta le pegaba. La pobre niña cómo podía defenderse a tal mujer horrible que era más grande que ella, como pudo ser tan vil y grosera con esa pobre pequeña que su única ilusión era aprender a dibujar y algún día hacer un libro escrito por ella. Tenía miedo de decirle a su mamá porque la maestra la tenia amenazada, pero por qué si sólo era una niña cayada y tímida. Casi no tenía amistades porque sólo se desquitaba con esa pequeña. Con el paso de sus añitos fue creciendo, sus compañeros se burlaban mucho de ella porque era muy chaparrita y en los recesos siempre la pasaba sola pero a veces cuando ella estaba sola imaginaba que estaba en un mundo donde había muchos arcoíris y caramelos, que era sólo de ella, donde había conejos y muchas cosas bellas que podría imaginar un niño a su edad. Cuando se sentía triste se refugiaba ella en su imaginación, en su mundo era hermoso lleno de colores y armonía, ella fue creciendo.
Cuando iba en tercero de primaria le seguía costando mucho trabajo hacer amistades, pero siempre era muy cayada se sentaba en un rinconcito a comer su almuerzo y a veces hasta su mami la acompañaba para que no estuviera sola. Su mamá les preguntaba a otras niñas que por qué no la juntaban, y muchas veces sus respuestas fueron porque ella no tiene lo mismo que nosotras, ella no es igual de bonita que todas nosotras, a Paola sólo le daba tristeza y su mamá le decía no te preocupes hija esas niñas son feas no les hagas caso. La pequeña Paola jamás vio con nada de maldad y siguió comiendo su almuerzo con su mami que la cuidaba y se sentía tan a gusto. Mientras, el hermano de Paola era un niño con un aparato en su pie que le impedía caminar bien pero era buenísimo para jugar futbol. Tenía su aparato bueno, a veces, se aflojaba poquito el tornillo de su
aparato para poder correr y meter goles, ese niño era todo para su hermana Paola a veces llegaban a pegarle a Paola, su hermano la defendía y les hacia caras. En ocasiones hasta lo interrumpían de su partido de futbol para decirle “Juan Carlos a tu hermana le pegaron otra vez. Ve a verla”. Él se molestaba porque en pleno partido lo interrumpían pero siempre estaba ahí para apoyarla. También Paola tenía 2 hermanas más grandes que ella una llamada vane y Karla. Vane, a veces se iba a defender a su hermanita y les jalaba los pelos a las niñas. Su otra hermana Karla, sólo se la pasaba con sus amistades como cualquier otro adolescente, la pequeña Paola a veces ya no podía imaginar cosas bonitas y estaba triste. No le gustaba ya la escuela porque la molestaban mucho, incluso ya ni comía bien estaba tan delgadita que lo que quería era morirse, porque ya no aguantaba el dolor y las burlas de esos detestables niños, incluso hasta su familia departe de su papá decía que era la niña más callada que jamás hablaba sin saber lo que ella sentía y lo que ella estaba pasando.
Paola se preguntó por qué fue tan tonta la niña y no habló, simplemente nadie lo sabe. Si era tan fácil decir mami, papi, hermanos los necesito no me dejen, me siento triste, sola , vacía , ¿Por qué carajos jamás dijo nada?
Pasaron varios años, la niña creció. Iba en secundaria, ya cuando entró, era feliz muy feliz, se creía que podía comerse el mundo a mordidas, ella era una señorita y era grande para decidir lo que le gustaba y lo que no. Ella se juró decir desde ahora: “diré lo que siento sin temor a nada pase lo que pase, yo soy fuerte y si una vez cuando era niña tenía un mundo de refugio lleno de arcoíris esta vez cambiara y mi vida será como yo la dibuje”.
Entró Paola a su salón de clases, “hola yo me llamo Paola vivo en el centro valle” ese colegio era de puras fresas y monjas, pensó que habría gente rica pero que no le importaba ella igual haría muchas amistades. Se encontró con una chica muy agradable llamada teresita que le brindo su amistad, sin pedir nada pues junto con otra niña de nombre Diana, una chica chaparrita, quizá más chaparrita que Paola fueron las tres mejores amigas del alma. Iban a todos lados juntas pero las demás niñas querían hacerle la vida imposible a Paola, pero sus amigas Teresita y Diana la defendían y ella se sentía. Las monjas no querían a Paola porque era una niña muy rebelde y contestona, pero ¿qué había pasado con esa pequeña tan cayada y educada la que solo escuchaba?, jamás se volvió a dejar creció en un mundo donde ella efectivamente empezó atraer las cosas buenas y algunas malas para ir creciendo con sabiduría, bueno después de todo al fin Paola tenia amigas por fin podría ir a fiestas y conocer más gente, paso varias escuelas porque se quejaba que los maestros eran muy malos con ella, Paola decía como me traten, trato. Una vez hubo una kermesse en su colegio se acercó un chico súper guapo le dijo - hola - ella emocionada respondió - hola, ¿quién eres?, le
respondió solo quiero saber cómo se llama tu amiga es que me gusto mucho, pobre Paola triste y desilusionada se marchó el chico solo se reía, -jajá pobre niña gorda pensó que me había gustado-, Paola no tuvo mucha suerte para los muchachos. Entonces Paola se empezó a preguntar cómo fue que engorde tanto de verdad si soy fea como me decían en la primaria, ¿merezco que me traten mal?, se quedo con esa idea mientras sus amigas muy vanidosas se arreglaban y tenían mucho pegue y le decían mira Paola si tú no te arreglas nadie te va hacer caso, es cierto dijo Paola. Entonces se empezaba arreglar pero jamás tenia suerte con los chicos, y la hacían llorar y quedar mal, los chicos que le gustaban a ella querían con sus amigas, pobre Paola pero habiendo tantos niños como nadie se podía fijar en ella si era de sentimientos bellos.
Cuando Paola cumplió 15 años no quiso festejarlos a lo grande ya que casi no tenia amistades, hicieron en su casa como una tipo disco, fue lindo ese día pensó ella, pero a esa edad empezó a ver que sus papás ya paleaban mucho que incluso se aventaban cosas y se odiaban. Pero, a pesar de eso ella los amaba con todo su corazón y su ser, eran sus papás ¿cómo no quererlos?, una vez más ya que había podido encontrar una sonrisa en su vida y seguir se opaco y se la pasaba muy triste los chavos seguían rechazándola por ser gordita y porque su forma de vestir era como la de un chico.
Pero cuando cumplió 17 años tuvo su primer novio ella era tan feliz por fin encontró al hombre de sus sueños, decía ella, pero, a veces era muy desconfiada y duraron poco, luego tuvo un novio que era de león lo había conocido por internet en un juego y el venía cada fin de semana a ver a Paola pero él la trataba mal pero ella seguía con él por no sentirse sola y desprotegida porque sus papas seguían discutiendo mucho. Sus hermanos sólo estaban en sus cosas o con sus respectivas parejas, ya con su amiga Teresita tenia conflictos y a Diana sólo la veía de vez en cuando. Paola se quedaba sola porque ellas dos eran sus únicas amigas.
Rodrigo era un chavo con muchos más problemas que Paola. ¡Ay, pobre Paola! ¡Cómo se pudo fijar en un hombre así!, pasaron los años y a la edad de 19 años de edad Paola lo dejó y andaba con un chico llamado Darío que creen , en la prepa se encontró a su mejor amiga Diana si esa niña chaparrita que tanto la defendía. Empezó hacer más amistades pero, Darío era un chico muy especial, y a veces no tenían ideas parecidas y chocaban mucho con su carácter, empezó Paola irse alejando de Darío poco a poco, Paola decía pero, cómo no encuentro a ese hombre ideal para mí. Conoció a unos chavos Mario, Víctor, Rodrigo, Roberto y varios más hasta se empezó a juntar mucho con un chavo llamado Alex que iba con ella en la primaria que era el chico mas rebelde y ahora era el más nerd, el más serio de todos.
En la prepa se la llevaba con un chavo llamado Víctor ah cómo se la pasaban, peleando pero a la vez salían mucho, Paola de repente empezó hablarle más a Mario ya que, era el guapo de la escuela. Entonces empezaron a salir ellos dos, el chico era un adolecente muy educado, muy amable, el tipo más caballeroso, pero ¿qué creen? Tenía un pequeño defecto, veía falditas y miraba para todos lados, ella anduvo con Mario ya que con ella era un chavo super caballeroso duraron poco y quedaron mal porque él le puso el cuerno.
Cuando salieron de la prepa Paola seguía frecuentándose con ellos pero salía más con Víctor el chico alto muy alto, medio fornido, el menos agraciado de todos. Pero, tenía algo el que le encantaba y era que siempre la escuchaba y a pesar de que muchas veces peleaban. Dejaron los rencores y propusieron ser amigos. Víctor tenía doble cara a veces, doble personalidad, se podría decir pero ella aun así se hizo muy amiga de él.
A Mario aún le seguía hablando como amigos, él quería que regresaran de nuevo, pero Paola se estaba enamorando de su gran amigo Víctor ya que él siempre la apoyaba y cuidaba en todo momento, él siempre trataba de que ella estuviera feliz. Pasó un año y anduvieron, si fueron novios pero, Víctor jamás la vio como novia más que amiga pero tenían buenos momentos juntos, aun que no era lo que ella esperaba y aún así siguieron juntos, duraron 3 años de novios luego terminaron porque Víctor se destapó diciendo que era bisexual y le gustaban los hombres. Sabía que había algo raro en él pensó Paola y aunque fue una fuerte desilusión para ella, siempre quedo todo lo que vivieron juntos. Él jamás volvió a tener interés en ella y son amigos hasta la fecha.
Paola encontró a un chico que le encantaba mucho ahora está perdido su novio por otro mundo, o que se yo, su nombre es Rafael y aunque terminaron un poquillo mal por un pequeño error del destino ella espera en junio que llegue su amor.
“He pasado por muchas cosas muy difíciles”, asegura Paola,” muy dolorosas que jamás entenderían porque las pasé pero, yo generé cosas buenas , y malas a mi vida, ahora digo mis papás siguen peleando. El mundo casi se derrumba, yo estuve triste muchas veces, pero a la gente siempre le dibujé una sonrisa. Les brindé amistad, confianza. No todos me siguieron pero aquí sigo de pie mirando hacia el frente, yo, Paola dibujando mi vida a mi manera y ahora soy feliz, porque aprendí a valorar todas las cosas que me pasaron y todo lo bueno, lo malo lo dejé, y mi vida termina con un final feliz siendo yo misma. La vida es bella y uno la ve como guste”.